El asesinato de una hija del general Urquiza

El chalet de Medarda de Urquiza dónde fue asesinada (Foto Caras y Caretas)

El 6 de abril de 1910 en horas de la noche, es asesinada en su estancia de San Joaquín de Miraflores, Distrito Molino, Doña Dorotea Medarda de Urquiza viuda de Sagastume, hija reconocida del Gral. Justo José de Urquiza, en su relación con Cándida Cardozo Pérez.

Medarda Urquiza viuda de Sagastume (Foto Caras y Caretas)

Al llegar las autoridades, la señora Medarda (como habitualmente se la conocía), se encontraba en su cama, presentando una herida de bala en la cabeza, con entrada por detrás de una de las orejas y salida por la frente.

Desde un primer momento se sospechó que el autor o autores del hecho era del entono cercano a la víctima, por lo que fueron detenidos quienes integraban el personal de la casa: Valentina Fernández, Antonia Muñiz, Ana López, Rosario Almada, Luis Benítez, Juan Balbi, Máximo Segovia y Juan Pereyra.

El cuerpo de Medarda fue trasladado a Concepción del Uruguay y velado en la capilla ardiente montada en la casa de su hija Sara Sagastume de Chiloteguy.
El sepelio se realizó en el panteón familiar del Cementerio Municipal. Una gran cantidad de personas acompañaron a pie a la carroza fúnebre que trasladó sus restos.

Finalmente, la menor detenida de 15 años de la servidumbre de la señora Medarda, Antonia Muñiz, se confesó autora del crimen, al cual lo había premeditado. 
Para tal fin, utilizó el revólver Bull Dog, calibre 10 mm, niquelado, propiedad de la señora y que esta guardaba en un mueble de su dormitorio. 

Antonia Muñiz, la joven asesina (Foto Cara y Caretas)

Muñiz ocupaba una habitación contigua. Siendo aproximadamente las 10 de la noche y al comprobar que su patrona se encontraba profundamente dormida, se acercó con el arma martillada y le efectuó un disparo.
Inmediatamente, luego de colocar el arma en el cajón de la mesa de luz, tomó las llaves con las que abrió la puerta y dio aviso al resto del personal que se encontraba durmiendo.

La joven habría tomado esta determinación por el resentimiento generado por una actitud violenta que la señora Medarda había tenido un tiempo antes con ella. Enterada que un pretendiente suyo había entrado a la casa en horas de la noche “sin pedir permiso”, haciendo alarde de su carácter fuerte, echó a rebencazos al joven y la reprendió duramente a ella.
Medarda había nacido en Gualeguay, el 8 de junio de 1847 y era viuda del Dr. José Joaquín Sagastume.

Texto: Omar Gallay. Fuentes: Trisemanario La Juventud (Concepción del Uruguay), Revista Caras y Caretas (Buenos Aires) y Balmaceda, D. (2011) “Biografía no autorizada de 1910”. Buenos Aires. Ed. Sudamericana.

Facebooktwitterredditpinterestlinkedintumblrmail

Dejá un comentario