Teatro “1° de Mayo”

Teatro “1° de Mayo”

La historia nos indica que en el lugar que hoy ocupa el Rectorado de la Universidad Nacional de Entre Ríos, funcionó el Teatro 1º de Mayo, primer edificio dedicado al arte de este tipo en Concepción del Uruguay.
En el año 1867 en que se constituyó la Asociación Promotora del Progreso de Concepción del Uruguay, quienes se proponen entre otros fines el de dotar a la ciudad de un teatro.
Finalmente, el 21 de noviembre de 1868, se produjo la inauguración del Teatro 1º de Mayo, con la actuación de una compañía dramática española. Para dar una idea de la magnitud de la obra, cabe consignar que para esa fecha la población de C. del Uruguay (capital de la provincia de Entre Ríos) era de 6.513 habitantes
El teatro tenía capacidad para 450 personas distribuidas en plateas, palcos altos y bajos y un paraíso con 120 asientos. La decoración estuvo a cargo del pintor Bernardo C. Victorica, quien pintó el interior del teatro y los adornos del cielorraso, en el que se destacaba un ángel cubierto por una túnica transparente. Victorica, después de abandonar C. del Uruguay realizó su obra cumbre, la ejecución del telón de boca del antiguo teatro Colón de Buenos Aires. Este pintor, Bernardo Cornelio, era hermano de Benjamín Victorica, secretario del general Urquiza y marido de Ana Urquiza, hija del general.
En el año 1926 el teatro estaba clausurado por el municipio por razones de seguridad y la comisión directiva juzgó que el costo era demasiado alto para los recursos de la Asociación, y eso sumado a que ese año vencía el plazo de vigencia legal de la misma que había sido conformada por 25 años. En base a estas razones se resolvió la disolución de la Asociación Promotora del Progreso y proceder al remate del edificio del teatro.
El ganador de la puja resultó el señor Inocencio Suilar. El día 24 de mayo de 1928, seis meses después del remate se procede al traspaso de la propiedad al Sr. Suilar, y en ese mismo acto el teatro es vendido a la señora Ambrosia Serafina Delaloye de Barral. Cabe señalar que la señora de Barral era ya propietaria del Hotel París, establecimiento que funcionaba lindero al límite sur del teatro.
El fin de la señora de Barral era conservarlo y remodelarlo conjuntamente con la expansión del hotel. El proyecto planeaba dotar al nuevo teatro de 535 butacas, con la platea en declive, un hall 40 metros cuadrados, espacio para orquesta, tertulia, 17 camarines con baño, etc. el costo del proyecto era de 206.000 pesos, suma elevada para la época y la crisis del ’30, hizo imposible conseguir la financiación.
Finalmente, ya muy deteriorado nuevamente clausurado por la municipalidad la señora Barral debió desistir de su obra y el histórico edificio fue demolido en el año 1930. (Fuentes principales:  
Oscar F. Urquiza Almandoz, Historia de Concepción del Uruguay Tomo I y II y Pref. Andrés Rousseaux, Edificios con historia,  año 1999. “Hotel parís, entre la nostalgia y la realidad“, Diario La Calle, 15 de diciembre de 1987)

Facebooktwitterredditpinterestlinkedintumblrmail

Dejá un comentario